Como amantes de las vías verdes, nos gusta pedalear por el máximo número de ellas. En esta ocasión nos animamos a conocer la única que hay en las Islas Baleares, concretamente en Mallorca.
Así que, cargamos las bicicletas en el coche y tomamos el Ferry Barcelona/Mallorca.
El tiempo no esta muy seguro, por lo que hemos puesto en el equipaje ropa de agua (de hecho siempre la llevamos en la mochila). El tiempo puede cambiar durante el recorrido de un kilometraje prolongado)…Pero cuando el pronóstico es lluvia, cruzamos los dedos para que sea un error de METEOSAT.
Mallorca es una isla con muchos tesoros naturales y culturales. En este post solamente vamos a destacar lo incluído entre los dos puntos de su Vía Verde: Manacor y Artà.
El primer recorrido del tren en Mallorca fue en 1921, con trayecto desde Manacor hasta Artà; la parte conocida como «Llevant» (en mallorquín).
En 1977 se cerró la línea de tren y en 2014 se inauguró la llamada Vía Verde de Baleares.
Es un área de colinas cubiertas de arboleda, valles tranquilos, pueblos pequeños con muchos lugares de interés, buena gastronomía y una muy variada linea costera.
Sus 29 km son un sendero ecológico que marca una ruta de fácil acceso de terreno llano, con desniveles suaves, por el que (como en todas las vías verdes, no circulan vehículos a motor).
Durante el recorrido podemos ver todo tipo de paisajes, incluyendo algunas vistas lejanas del mar.
Comenzamos el recorrido en Artà. La estación es una tienda dedicada a los productos artesanos locales.
Hoy es martes, día de mercado, el más importante de la isla, por lo que dejamos las bicicletas contrapuestas aparcadas cerca de los primeros tenderetes, y …¡ A curiosear!
Nos llaman la atención los puestos dedicados a la artesanía (cestería, joyería, cerámica) mezclados con bares, restaurantes, heladerías…entre tiendas y tenderetes de productos locales.
En todo su perímetro, convertido en peatonal, se respira tranquilidad. Hay mucha animación, gente y movimiento pero sin bullicio.
En su zona cubierta están los puestos de verduras, panes y cocas artesanas o la zona del pescado.
Es un mercado muy completo, colorista y pintoresco. Nos llama la atención la cantidad de objetos de piel, cuero, bolsos y calzado. ¡Incluso nos compramos unas botas!
Mallorca goza de fama internacional con sus marcas de calzado entre las que destacamos: Farrutx, Heymo, Camper, Monge, Carmina Shoemarker y Barrats entre otras…
Seguimos ruta sorprendidos por el tan magnifico día de sol que colorea el paisaje. El viento nos trae aroma de lavanda. Hay parterres gigantescos a ambos lados del sendero compitiendo en color con la retama. Es un derroche de olor y color.
Encontramos el desvío hacia “Ses Païses”, la huella de la prehistoria de Mallorca. En la entrada hay aparcamiento para bicicletas, por lo que dejamos también los cascos.
El poblado talayótico es uno de los yacimientos arqueológicos más importantes y mejor conservados de Baleares.
El asentamiento surgió con la construcción de un talaiot circular alrededor del que se crearon diversas viviendas y estructuras rituales. Santuario, sala hipóstila, edificio de columnas, casas rectangulares y la espectacular muralla de forma elíptica; con un perímetro de 320 m, que delimita 11,5 ha.
Estas ruinas prehistóricas de Ses Païses, del 850 aC, son uno de los yacimientos arqueológicos más completos y bien conservados de Mallorca. En donde destaca la gran muralla ciclópea con su espectacular puerta monumental, que se ha convertido en uno de los símbolos de la prehistoria de la isla. Situadas en una suave colina que ocupa una posición central dentro del Valle de Artà. En 1946 fue declarado monumento histórico-artístico.
El poblado se configura alrededor de un talayot central alrededor del que hay varios círculos de viviendas y edificios de uso social.
Alternar pedaleo con visitas no es que sea lo ideal, cuando lo que nos gusta es quemar calorías al máximo, pero…hay lugares importantes a tener en cuenta, especialmente cuando están tan cerca del itinerario.
La calzada es de ripio compactado, aunque hay tramos del kilometraje en los que la piedra está suelta y las bicicletas cimbreante a la vez que la cabeza se resiente…
Por el momento solamente nos encontramos con un túnel corto, sin necesidad de encender los frontales, ya que la visibilidad es buena. La vía se nos presenta solitaria, apenas nos cruzamos con algunos ciclistas o caminantes.
Nos desviamos de la Vía Verde hacia Son Servera para visitar la Esglesia Nova de estilo neogótico. Es una iglesia inacabada destinada al culto católico y a las actividades culturales. La obra se inició en 1905, pero debido a problemas de financiación tuvo que suspender su construcción en 1929.
La visitamos solos. No hay ni un alma, tan solo palomas…Es verdaderamente curioso ver el cielo por techo. Imaginamos su sugestivo emplazamiento durante la celebración de conciertos u otros eventos.
La vía transcurre por las estaciones de Son Servera, Son Carrió y Sant Llorenç.
Entre la flora, destacamos arbustos, pinos, robles y tamarindos.
La Mallorca rural es la despensa de la isla. Sus campos y huertos protegidos con altos márgenes de piedra aportan: col, lechuga, escarola, tomate, cebolla, borraja, calabaza, canónigos, pimientos, aceite de oliva y almendras.
A parte de los cítricos, (naranjas, mandarinas y limones), también cobran peso los albaricoques y algarrobas.
A lo lejos se divisa Manacor, la segunda ciudad más grande de Mallorca, llamada cuna de la perlas artificiales ya que las produce e industrializa.
Llegamos hasta la estación, aunque la vía verde termina justo en la entrada de la ciudad.
Buscamos una pastelería para comprar ensaimadas…
Y sobrasada ( cuanto más fea mejor…así nos han hecho el encargo). Bien sujetas en el “portaensaimadas”, regresamos deshaciendo lo pedaleado hasta el hotel.
Siempre de vuelta, aunque el camino sea el mismo, se ve otro paisaje. Campos de viñedos, campos arados, que esperan ansiosos la lluvia que no se decide a caer…
Nos llegamos a visitar la basílica paleocristiana de Son Peretó, muy cercana al hotel.
Los restos arqueológicos que observamos pertenecen a los siglos V al VII d.C., son los llamados siglos oscuros por los pocos conocimientos históricos que se tienen tanto en Baleares como en el resto del Mediterráneo.
La zona escavada comprende: Baptisterio, Iglesia, recinto funerario, viviendas y área de mercado.
En estas pilas bautismales se bautizaba por inmersión total. La de mayor tamaño a los adultos que descendían por los escalones,
y en la más pequeña a los niños.
El pavimento en su mayor parte era de mosaicos, realizados con pequeñas piedras de colores diferentes. Un gran número de estos están en el Museo de Manacor.
La pieza más importante es la que cubría la tumba de una mujer llamada Valèria. Su historia es tan enigmática como desconocida.
Y en un plis plas, nos damos cuenta que ya se nos acabó el tiempo… Cargamos bicicletas, sobrasada, ensaimadas y con “morriña” nos despedimos de la Vía Verde que tanta desconexión nos ha aportado.
En el ferry, hacia Barcelona, pensamos ya en buscar la ocasión para realizar y conocer otra vía verde. ¿Dónde será…?
Antes de hablar de su gastronomía, queremos compartir el origen de su ensaïmada. Esa masa azucarada, fermentada y horneada, elaborada con harina, agua, azúcar, huevos, masa madre y manteca de cerdo, ( en mallorquín “saïm, de allí su nombre. Se le atribuye el origen árabe, presentes en la isla desde 1109.
Los árabes, elaboraban un dulce en forma de caracol al que denominaban “bulema”, cuyos ingredientes eran los mismos de la ensaimada a excepción de la manteca de cerdo.
Gastronomía: La gastronomía de Mallorca es un abanico de sabores, colores y aromas que hablan del más puro Mediterráneo.
FRITO MALLORQUÍN: Un plato muy potente en sabores. Se cocina con cordero o cerdo asado ( higadillos, corazón, pulmones y vísceras en general, hinojo fresco (fonoll), cebolleta, pimiento rojo, coliflor, patatas, ajo y laurel.
PESCADO A LA MALLORQUINA : Su preparación es al horno, con pescado blanco – generalmente mero o merluza con acelgas, cebollas, patatas, tomates , pimientos, laurel, perejil, fonoll, pasas, piñones, zumo de limón y un chorrito de vino blanco.
ARRÓS BRUT: Es un arroz caldoso a base de higadillos de conejo y pichón, costilla de cerdo, butifarrón, sobrasada, setas, guisantes, judías redondas, alcachofas, tomate y una pizca de canela. Se cocina en olla de barro a fuego lento con la intención de que quede meloso.
PULPA DE TAMARINDO: Es comestible y se puede comer al natural, en zumo, e incluso en mermelada. También se suele utilizar como ingrediente de diversos menús.
Teja de almendras y miel con queso fresco a las hierbas.
Continuarán las Vías Verdes…
Galeria de imágenes:
GENIAL, TODO ESPECTACULAR UNAS VISTAS PRECIOSAS, LO DEL TREN NO SABIA QUE HABIA EXISTIDO , OS DOY LAS GRACIAS POR TODO LO QUÉ NE MANDAIS , SIEMPRE SE APRENDE UNA COSA MAS MALLORCA TAMBIÉN TIENE SUS ENCANTOS, LAS PLAYAS ETC. BESOS PARA LOS DOS .
María, muchas gracias por tu comentario. Mallorca es bonita siempre. Está muy cuidada. La vía verde es fantástica, además entre semana y en esta época es una delicia de paz y tranquilidad. Un abrazo de Conmasde70.